El 12 de junio se celebra el día mundial contra el trabajo infantil, una condición presente en muchos países y que es la realidad de muchos de nuestros niños en México. Has pensado en ¿Cómo sería tu vida si hubieras tenido que trabajar de pequeño? ¿Estarías en el lugar donde te encuentras hoy? ¿Tendrías las mismas oportunidades o posibilidades?
Lamentablemente, nuestra realidad no es la misma que la de 2.5 millones de niños que trabajan en México. De acuerdo a datos de UNICEF, 1 de cada 4 niños trabajan para ayudar a su familia, debido a las condiciones en las que viven, siendo forzados a abandonar su infancia para cargar con las responsabilidades de un adulto. Hay sectores de la población en la que se ve a los hijos como fuerza de trabajo, manos para arar la tierra, que cocinen, que cuiden de uno cuando envejezca; sin embargo ¿Ese es su fin último en la vida?
Y esta condición, ¿qué impacto psicológico tiene en los niños? Se considera que el trabajo tiene un efecto grave en los pequeños, si a uno como adulto le trae una serie de implicaciones, imagina cómo se podría estar sintiendo un niño en situaciones similares.
El efecto más preocupante es el estrés, esto se genera porque indudablemente al tener un cargo laboral, el niño comienza a adquirir responsabilidades mayores a las que podría sobrellevar por su edad, y por lo general estas tareas van aumentando gradualmente al adquirir otras responsabilidades en casa. Los papás cargan la mano a sus niños, pensando que pueden con eso y más, sin embargo esto les quita tiempo necesario para desarrollar habilidades propias de la infancia como las sociales, donde entra la capacidad de empatía sumamente importante para entender y tener una adecuada conducta social.
Por otro lado, se limita su capacidad para desarrollar un pensamiento crítico y curioso, pues tienen que seguir reglas sin dudar en ellas, es decir que no se les impulsa a pensar por sí mismos. Además, por lo general no van a la escuela por sus labores en el trabajo, así que se ven limitados en cuanto a conocimiento y posibilidades diferentes para aspirar a otro futuro. Frente a esta realidad, ¿Qué niño no desearía huir al país de Nunca Jamás de Peter Pan?